imprimir página

Castile / Castilla. Louise Glück. 1943 -




Castile

by Louise Gluck


Orange blossoms blowing over Castile
children begging for coins

I met my love under an orange tree
or was it an acacia tree
or was he not my love?

I read this, then I dreamed this:
can waking take back what happened to me?
Bells of San Miguel
ringing in the distance
his hair in the shadows blond-white

I dreamed this,
does that mean it didn't happen?
Does it have to happen in the world to be real?

I dreamed everything, the story
became my story:

he lay beside me,
my hand grazed the skin of his shoulder

Mid-day, then early evening:
in the distance, the sound of a train

But it was not the world:
in the world, a thing happens finally, absolutely,
the mind cannot reverse it.

Castile: nuns walking in pairs through the dark garden.
Outside the walls of the Holy Angels
children begging for coins

When I woke I was crying,
has that no reality?

I met my love under an orange tree:
I have forgotten
only the facts, not the inference—
there were children, somewhere, crying, begging for coins

I dreamed everything, I gave myself
completely and for all time

And the train returned us
first to Madrid
then to the Basque country



Azahar que sopla sobre Castilla

niños pidiendo monedas

Conocí a mi amor debajo de un naranjo

o era una acacia

o no era mi amor?

Leí esto, luego soñé esto:

¿Puede el despertar recuperar lo que me pasó?

Campanas de San Miguel

sonando en la distancia

su cabello en las sombras rubio-blanco

Soñé esto

¿Eso significa que no sucedió?

¿Tiene que suceder en el mundo para que sea real?

Soñé todo, la historia

se convirtió en mi historia:

se acostó a mi lado,

mi mano rozó la piel de su hombro

Medio día, luego en las primeras horas del atardecer:

en la distancia, el sonido de un tren

Pero no era el mundo:

en el mundo, una cosa sucede finalmente, absolutamente,

la mente no puede revertirlo.

Castilla: monjas paseando por parejas por el jardín oscuro.

Fuera de los muros de los Santos Ángeles

niños pidiendo monedas

Cuando desperté estaba llorando

¿Eso no tiene realidad?

Conocí a mi amor debajo de un naranjo:

he olvidado

solo los hechos, no la inferencia

había niños, en alguna parte, llorando, pidiendo monedas

Soñé todo, me di

completamente y para siempre

Y el tren nos devolvió

primero a Madrid

luego al País Vasco.


No hay comentarios: