El viernes,
treinta y uno de octubre
de esta año cualquiera,
una mujer saltó
del puente de Vessy al río
Arve.
Su cuerpo fue recuperado
por los hombres del puesto permanente.
El otoño desciende en avenidas,
procesional y enorme,hasta los bordes
amarillos del aire
Salud,hermana.
En la noticia anónima
no te acompañan deudos
ni cercanos amigos.
Sólo un rastro
de soledad arrastran sin tu cuerpo
los dolorosos ríos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario