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Manuel María 1929 - 2004. Senderos de los sueños 6/ Carreiros dos soños 6







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En verdad es muy hermosa mi vida.

No me puedo quejar,

¿ Le importará a alguien mi lamento?

¿Se acercara a mí cualquier ser

para darme su ayuda generosa?

¿Comprenderá alguien estas palabras?

¿Valdrán para algo estos mis sueños?

¿Será de alguna utilidad estar

mirando extasiado para las estrellas?

¿Que diferencia puede existir

entre el valor del oro y el del sueño?

Quién sabe si las cosas nos comprenden

y tienen por nosotros una pena infinita!

Nada sé cierto. Nada es mío.

Me dejó uncir por el destino

que la vida quiso darme.

Puedo mirar ensimismado el agua siempre andando,

la riqueza de la tierra,

la belleza que está a mi lado

y aguardar por la muerte.

El árbol también muere. Y muere la flor.

De todo cuanto vive sólo yo sé

que la existencia es un don maravilloso:

a veces se hace resplandor

y la hermosura ilumina el universo.

Más cuando se debilita el brillar de nuestra luz

la noche llega a nósotros.

Entonces es la tristeza.




EN verdade é moi fermosa a milla vida.

Non me podo laiar,

¿Importaralle a alguén o laio meu?

¿Chegarase a mín calquera ser

para darme a sua axuda xenerosa?

¿Comprenderá alguén estas palabras?

¿Valerán para algo estes meus soños?

¿Será de algunha utilidade estar

olIando estantío prás estrelas?

¿Que diferencia poder esistir

entre o valor do ouro e o do soño?

iQuen sabe se as causas nos comprenden

e teñen por nós unha mágoa infinita!

Nada sei de certo. Nada é meu.

Déixome xunguir polo destino

que a vida quixo darme.

Podo ollar enviso a auga sempre andando,

a riqueza da terra,

a beleza que está á miña veira

e agardar pola morte.

A árbore tamén morre. E morre a flor.

De todo canto vive só eu sei

que a esistencia é un don maravilloso:

ás veces faise o resplandor

e a fermosura ilumina o universo.

Mais cando esmorece o centilar da nosa luz

a noite chega a nosotros.

Entón é a tristeza.








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