Silos.
La sombra del alto cedro
Extiende su paz serena
Calma y quietud
Meditativo el silencio
Del encantado jardín
La fuente rompe
En el claustro monacales
Tranquilos pasos desgastan
Las viejas piedras
Románicos capiteles
Sobre columnas esbeltas
Nos hablan mudos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario